Oraciones a San Juan de Licópolis

San Juan, nacido en Asiut a principios del siglo IV, pasó su vida en la Tebaida entregado a la oración y la penitencia. Proveniente de una familia pobre, se dedicó a la carpintería en su juventud. Guiado por un santo monje, aceptó la singular prueba de regar un árbol seco, demostrando su obediencia y mortificación. Su vida en el desierto implicó una dieta austera, con hierbas y agua, junto a extensos períodos de oración y penitencia.

A pesar de las adversidades, mantuvo su buen humor. Atrajo a personas en busca de consejo, mediación en disputas y asesoramiento sobre asuntos políticos y militares. Sus profecías se cumplieron, y su reputación creció. Juan no permitía que las mujeres se acercaran a su celda. Murió en el año 394 tras 75 años en el desierto, sin dejar escritos conocidos. Su legado destaca el camino del arrepentimiento que todos pueden seguir, humanizándolo al igual que a otros ermitaños.

Oración a San Juan de Licópolis

Tú que moviste a San Juan de Licópolis a dejar las vanidades del mundo e irse a la soledad del desierto a orar y meditar, concédenos también a nosotros, dedicar muchas horas en nuestra vida, apartados del bullicio mundanal, a orar, meditar y a hacer penitencia por nuestra salvación y por la conversión del mundo.

Amen.

Oración a San Juan de Licópolis para Pedir su Intercesión

Dios todopoderoso y misericordioso, te agradecemos por la vida y santidad de San Juan de Licópolis, quien dedicó su existencia a la oración, penitencia y servicio en el desierto. Concédenos, por su intercesión, la gracia de encontrar la paz en la soledad, la sabiduría para discernir tu voluntad y el valor para vencer las tentaciones. Que su ejemplo de humildad y devoción inspire nuestras vidas y nos guíe en nuestro camino hacia Ti. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Amén.

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