Biografía de San Agustín de Canterbury – 27 de mayo

En inicios del siglo VI, el catolicismo ya había entrado a Inglaterra, pero por diversos motivos, su desarrollo se detuvo, uno de los más importantes son los sajones que intentaron erradicar el cristianismo, en Irlanda en cambio, San Patricio si había logrado convertir a muchas personas del lugar. No fue hasta finales del mismo siglo que otro santo llevó el cristianismo a Inglaterra y esta vez sí se desarrolló de una manera increíble, este santo no es otro que San Agustín de Canterbury.

Historia de San Agustín de Canterbury

Poco conocemos de San Agustín antes de llegar a Gran Bretaña, lo poco que se sabe es que era un monje benedictino y que vivía en un monasterio fundado por San Gregorio Magno en Roma, San Gregorio fue el de la idea de mandar 40 monjes evangelizadores a aquellas tierras en el año 596 y pidió que Agustín sea quien los dirigiera. Los monjes por su paso en las tierras donde ahora es Francia, preguntaron a los obispos del lugar quienes les decían la mala idea de ir a la isla anglosajona a predicar ya que era bastante crueles, por lo que los misioneros decidieron consultar primero al Papa Gregorio.

 En ese entonces, en la Isla donde ahora es Inglaterra había un pequeño reino al sur llamado Kent, el rey de ese lugar era Ethelberto quien se había casado con una princesa llamada Bertha, originaria del reino franco de París, perteneciente a la Dinastía de los Merovingios la que también era Católica, por lo que el Papa les indicó a Agustín y sus compañeros que era la oportunidad perfecta para ir a evangelizar aquellas tierras.

El Santo Apóstol de Inglaterra

San Agustín y los monjes arribaron a la isla a inicios del año 597 y se fueron directamente con el rey para pedirle su permiso de evangelizar en la isla, hicieron una presentación bastante extensa la que sorprendió al rey y dio rápidamente la aprobación a los monjes misioneros que predicaran la palabra. En la navidad del año 597, mas de 10,000 personas recibieron el bautismo, entre ellos, muchas personas de la realeza, incluyendo al rey. Agustín regresó a Arles en Francia donde le conto al arzobispo del lugar todo lo logrado en la isla, por lo que el arzobispo le confirió la consagración episcopal por órdenes del Papa.

San Gregorio envió desde Roma muchos misioneros más para que llevaran la palabra por toda a isla anglosajona, el recibimiento de la fe Católica fue tan grande que el Papa le confirió el titulo de Arzobispo a San Agustín para que creara varias diócesis en el país dando como resultado que en los primeros años del siglo VII, ya habían 3 grandes diócesis, la de Londres, la de Rochester y la de Canterbury, donde el arzobispo era San Agustín.

Fallecimiento de San Agustín de Canterbury

El santo y los misioneros convirtieron a muchos en toda la isla pero no pudieron llegar a varios pequeños reinos porque eran bastante conflictivos y enemigos entre ellos, pero dejaron aquella pequeña semilla que con el tiempo creció y dio sus frutos en toda la isla. El 26 de mayo del año 605 fallece San Agustín y fue sepultado allí mismo.

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