Biografía de Beato Pedro Vigne – 8 de julio
Sacerdote francés que ingresó a la Congregación de la Misión y luego fundó la Congregación de las Hermanas del Santísimo Sacramento.
Historia de Beato Pedro Vigne
Pedro Vigne nació el 20 de agosto de 1670 en Privas, Francia, en una época marcada por las secuelas de las guerras religiosas. Hijo de un comerciante textil y una madre católica devota, Pedro vivió en relativa comodidad con sus padres y dos hermanos mayores. Su vida tomó un giro significativo cuando, al final de su adolescencia, experimentó la presencia de Jesucristo en la Eucaristía, lo que lo llevó a consagrarse a la vida religiosa.
Ingresó al seminario sulpiciano de Viviers en 1690 y fue ordenado sacerdote en 1694. Durante seis años, sirvió como coadjutor en Saint Agrève, cultivando amistades y estrechos lazos con los fieles. Sin embargo, sintiendo un llamado más profundo, Pedro se unió a los Lazaristas en Lyon en 1700, recibiendo formación en pobreza y misiones populares.
Después de seis años con los Lazaristas, Pedro, guiado por su pasión por las almas y la evangelización, se convirtió en un «misionero itinerante». Durante más de treinta años, recorrió incansablemente los caminos de Vivarais y Dauphiné, enfrentándose al cansancio y las inclemencias climáticas para llevar la palabra de Jesucristo. Su ministerio abarcó la predicación, visitas a enfermos, catequesis, administración de sacramentos y la enseñanza de la adoración eucarística.
Fundación de la Congregación de las Hermanas del Santísimo Sacramento
En Boucieu, Pedro estableció su residencia y fundó la Congregación de las Hermanas del Santísimo Sacramento en 1715. Este grupo se dedicó a la adoración perpetua de Jesús en la Eucaristía y la enseñanza de la juventud. Pedro también se preocupó por la instrucción de los niños y fundó escuelas y un seminario para maestras de escuela.
A lo largo de su vida, Pedro buscó apoyo espiritual y temporal. Mantuvo contacto con sus antiguos maestros en San Sulpicio y se unió a los Sacerdotes del Santísimo Sacramento en 1724. Mientras continuaba su trabajo con la congregación, también escribió libros sobre reglamentos de vida, espiritualidad y meditaciones centradas en Jesucristo en la Cruz.
Fallecimiento de Beato Pedro Vigne
A pesar de su robusta constitución física y su apasionado amor por Jesucristo, Pedro empezó a mostrar signos de cansancio a los 70 años. Durante una misión en Rencurel, Vercors, tuvo que interrumpir su predicación debido a un malestar. Aunque intentó celebrar la Eucaristía y exhortar a los fieles, reconoció que su fin estaba cerca. Murió el 8 de julio de 1740, en profunda oración, rodeado de un sacerdote y dos Hermanas. Su cuerpo descansa en Boucieu, donde fue trasladado después de su fallecimiento. La vida de Pedro Igneo es un testimonio de su inquebrantable devoción a Jesucristo y su incansable servicio a las almas.
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