Biografía Santa Catalina de Génova – 15 de septiembre

Santa hijas de nobles que dejó su vida de riqueza luego de su conversión para poder servir a los enfermos y más necesitados.

Historia de Santa Catalina de Génova

Catalina nació en el año 1447 en la Serenísima República de Génova, actual Italia. Era hija de hija de Jaime Fiesco y Francesca di Negro, nieta de Roberto quién hermano del papa Inocencio IV. En ese tiempo, muchos nobles italianos patrocinaban a los artistas y escritores del renacimiento. Las necesidades de los pobres y enfermos a menudo eran opacadas por un afán de lujo y autosatisfacción.

Los padres de Catalina eran miembros de la nobleza en Génova. Cuando la santa tenía 13 años quiso ser religiosa, pero no pudo a causa de su edad. A los 16 casó con Julián Adorno, un noble egoísta e incrédulo. Vivió cinco años de encierro en profundo sufrimiento y depresión. Por otros cinco años, movida por sus amistades, intentó adormecer su depresión y aislamiento con una vida mundana y egoísta en los ambientes de la aristocracia, sin muchas preocupaciones morales.

Conversión de Santa Catalina de Génova

Catalina sintió la necesidad de recuperar la paz interior, acudió donde su hermana monja para exponerle sus cruces y ansiedades, y por toda respuesta recibió la invitación a reiniciar su vida cristiana mediante la frecuencia de los sacramentos de la reconciliación y la Eucaristía. Luego de confesarse el 22 de marzo del año 1473 tuvo una vívida conciencia de sus pecados y de lo mucho que Dios la había amado. Reformó su vida, comulgaba diariamente, algo poco común en aquellos años, hacía grandes penitencias y obras de caridad al servicio de los enfermos en sus casas y en los hospitales, sin rehuir los servicios más humildes.

Con su buen ejemplo logró la conversión de su esposo Julián y ambos ingresaron a la Tercera Orden Franciscana. En 1493, asistiendo a los enfermos se contagió de la peste, pero al recobrar la salud continuó al servicio de los necesitados.

Fallecimiento de Santa Catalina de Génova

Sin embargo, los despilfarros de Julián los habían arruinado. El y Catalina decidieron vivir en el Pammatone, un gran hospital en Génova, y dedicarse allí a obras de caridad. Después de la muerte de Julián, en 1497, Catalina se hizo cargo de la dirección del hospital. Escribió acerca del purgatorio, que, según cuenta ella, comienza aquí en la tierra, y sobre otros temas de espiritualidad. La vida con Dios en el cielo es una continuación y perfeccionamiento de la vida con Dios sobre la tierra. Agotada por tantos años de sacrificio, murió el 15 de septiembre del año 1510.

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