Biografía de San Adeodato I Papa – 8 de noviembre

Santo Papa número 68 de la iglesia Católica. Sucedio a Bonifacio IV y lo sucedió Bonifacio V en el Papado.

Historia de San Adeodato I Papa

Adeodato fue Papa cuando ya la iglesia estaba casi completamente fuera del poder bizantino, quienes ya tenían bastantes años de haber tomado Roma. El Papa también es conocido como Diosdado y Deusdedit.

Hubo levantamientos en Rávena, en Nápoles y en la misma Roma. Los territorios gobernados por los Lombardos, por lo contrario, gozaban de cierta tranquilidad.

Tiempo como Siervo de Dios

Sobre la vida del Papa conocemos muy poco, entre estos datos sabemos que era hijo del subdiácono romano Esteban. También se sabe que Adeodato fue sacerdote 40 años antes de ser Papa y que sólo fue pontífice durante 3 años, del 615 al 618.

Fue amado y llorado por los romanos, que pudieron apreciar el buen corazón durante las grandes calamidades que atormentaron a Roma durante los tres años de su pontificado: el terremoto, que dio el golpe de gracia a los marmóreos edificios del Foro, ya desbastados por las continuas invasiones de los bárbaros, y una terrible epidemia llamada elefancía.

Un Gran Guía de la Iglesia

Fue el primer Papa que estableció con testamento donaciones para distribuir al pueblo con ocasión de los funerales del sumo pontífice. En Roma el Papa no sólo era el obispo y el pastor espiritual, sino también el guía civil, el juez, el supremo magistrado, el que garantizaba el orden. A la muerte de todo pontífice los romanos se sentían sin protección, expuestos a las invasiones de los bárbaros nórdicos o a las venganzas del imperio de Oriente. La teoría medieval de los «dos soles», el Papa y el emperador, que deberían gobernar unidos al mundo cristiano, no era aceptada en Constantinopla.

El Papa tenía muchas habilidades y cualidades, era gran mediador y muy paciente con el emperador romano.

Tuvo fama de ser un taumaturgo: curaba las formas más graves de peste con sólo apoyar sus labios sobre las llagas inmundas de los enfermos. Baronio pone en el Martirologio Romano un episodio que confirma la fama de santidad que rodeaba al venerable pontífice Adeodato como guía de los cristianos en una época tan atormentada: durante una de sus visitas a los enfermos, los más abandonados, lo más atacados por la terrible enfermedad de la lepra, habría curado a uno después de haberlo abrazado y besado cariñosamente.

El Liber pontificalis, recordando dos hechos de su pontificado, afirma que Adeodato amó mucho a su clero, al que defendió respecto del clero monástico o regular, privilegiado desde cuando Gregorio Magno les había confiado a los monjes importantes cargos en el apostolado misionero y en la misma organización eclesial. El segundo hecho se refiere a la facultad de celebrar una segunda misa el mismo día.

La Bula Papal

De él se conoce el sello de plomo con el que solía marcar los documentos oficiales: el Buen Pastor entre las ovejas y los símbolos cristológicos de alfa y omega. Fue el primero que lo usó. Su forma es redonda, grande como una moneda y en latín se llama bulla, de la que deriva bula. Dejó un regalo de plata a cada clérigo presente en sus funerales.

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